Kelly Slater en Trestles |
Recordé una vez más la ilusión de el ejecutivo de ventas de un elegante Banco Local (que su nombre voy a omitir), que pensando que yo iba a hacer uso extensivo de una tarjeta de crédito exclusiva, me otorgó una tarjeta de pase a los clubs VIP del aeropuerto. Esta vez Numa y yo disfrutamos de algo de comida, un par de cervezas, el crucigrama del día y acceso wireless sin costo. (Mis disculpas al ejecutivo de ventas en mención, ya que en 14 meses aún no he consumido de esta tarjeta ni siquiera el equivalente a un billete de Santa Rosita… J)
Sentado en el avión a las 12:30am (aproximadamente), celular apagado, encomendé mi viaje para que todo saliera bien durante él y al retorno, y como es usual en mí, caí profundamente dormido, incluso mucho antes que los pasajeros terminasen de abordar…
Zzzz…
Zzzzz…
(un niño de 8-9 meses entró en ataque de llanto a 4 filas de distancia, pese a la intensidad del llanto y los esfuerzos del avergonzado Padre de calmar a la criatura, que estaba anunciando a todo el 767 que él mandaría en ese viaje, no fue suficiente para obstruir mi reunión con Morfeo)
De repente…. Siendo las 2:15pm (creo) se escucha una voz: “…señores pasajeros, el capitán nos informa que por un desperfecto en la puerta de la bodega, las autoridades no nos permiten la salida, por lo que les pedimos que bajen del avión con todos sus objetos personales y el personal de tierra les indicará cómo procederá su vuelo y conexiones…” Mientras redacto este post, tengo que confesarles que he aprendido hoy algo de la industria aeronáutica, y es que cuando te dicen “…por un desperfecto en xxx…” realmente quieren decir “…por una razón que no nos resulta conveniente compartir con ustedes…” o “…tenemos una señal en el tablero que no tenemos la más remota idea de lo que significa….”
Comenzó el Caos. Aglomerados en la misma puerta por donde entramos al avión, los cientos de pasajeros se amontonaban en el counter para que los indefensos sobrecargos de LAN tratasen de resolver algo que –obviamente- estaba por encima de sus capacidades o de su voluntad de servicio. Intentaron categorizar a la turba entre “pasajeros que venían de otras conexiones”, “pasajeros que salían de Lima, pero que se les notaba más tranquilos (entre los que nos encontrábamos nosotros), y “pasajeros que sin importar de dónde venían, ya estaban con señales de querer tumbar el mostrador, o pegarle a algún funcionario de LAN”. Después de cerca de 2 horas, o sea a las 4:30am, nos fue entregado el pasaporte y nos pidieron que vayamos al mostrador principal del aeropuerto para poder ser asignados de un transporte, un hotel, comida y probablemente un vuelo posterior a nuestro destino.
Mientras caminábamos a la salida de vuelos nacionales cargados de nuestras maletas y con los sarcófagos de tablas, pensábamos que la parada en Los Angeles, (habían cosas imprescindibles que tenemos que comprar antes de entrar a las aguas de Bali), nuestro día de turismo en Hong Kong, y nuestra llegada a Bali para agarrar la crecida descrita en entregas anteriores por Gonzalo “Camarito” Barandiarán, estaban claramente en riesgo.
Tan pronto como salimos a la zona del mostrador de LAN, nos percatamos que el gran problema recién estaba empezando. Minutos antes de las 5am es cuando los cientos (o miles) de pasajeros que LAN convoca para salir de Lima en las docenas de vuelos que parten de Lima a Provincias, y en los muchos que hacen lo mismo para vuelos internacionales, se estaban amontonando sin poder resolver sus propios itinerarios, ya que además de nuestro vuelo, LAN había cancelado otros dos vuelos ese mismo día, presumo que por “…desperfectos en el accesorio xyz…”.
Bailamos de un counter al otro. En ninguno nos daban razón de la hora de salida del vuelo, y mucho menos de hotel y transporte. Adicionalmente cargar con las dos fundas de 2mts c/u en medio de esta turba enajenada de personas resultaba complejo y exaltaba los ánimos de quienes eran rozados, empujados e incluso tumbados por nuestras fundas FORTUNA y RIP CURL respectivamente. Llegamos donde un gentil –y emocionalmente estable, cosa que no era el común del resto de sobrecargos- ejecutivo de LAN que nos dijo que podría cocinar un nuevo itinerario que saldría a media mañana y que con mucha suerte nos permitiría alcanzar a la conexión que teníamos a Hong Kong a las 11:50pm de ese mismo día en Los Angeles, pero como él y los demás empleados de LAN estaban a punto de morir apedrados o quemados por la multitud, que nos hiciéramos a un lado hasta que él pudiera tomarse el tiempo de hacer toda la gestión. Para entonces comenzaba a amanecer y nos acompañaba el gentil y siempre bien dispuesto Jorge Oblitas, a quien Numa apodó acertadamente “Figaredo”. Jorge estaba en la misma situación, aunque su destino era el always-sunny-Redmond, así que su periplo era ciertamente más corto que el nuestro.
Vale la pena mencionar que unos cuantos pasajeros frustrados protagonizaron escenas de escándalo público, insultando a la aerolínea y a sus empleados, amenazando con mandar notas de escándalo a Panorama y Cuarto Poder (como si una simple Fuente Ovejuna en el Aeropuerto vaya a tener más rating que un Humala negociando con la mafia Rusa o una caminante hipnotizada tratando de responder cómo es que el Condor del Colca se llevó hambriento a su novio), mientras que otros más ilusos grababan estas escenas con sus teléfonos celulares para luego ponerlas en youtube, donde sólo ellos lo verían…
Cerca de las 8:00am, ayudados por este gentil asistente y por el personal VIP de tierra de LAN, de quien tengo que confesar que compartían la misma ignorancia del resto del personal, aunque brillaban por su gentil trato y capacidad de calmar a las fieras, nos confirmaron que podíamos tomar un vuelo de TACA a media mañana a San Salvador, para luego conectar a Los Angeles, y que con mucha suerte podríamos recorrer cargados como Ekekos el Tom Bradley y así tomar la conexión a Hong Kong. Era una absoluta certeza que perdimos la parada y compras en Huntington Beach y Trestles, pero al menos podríamos llegar a la China según la agenda.
Lo demás fue igual de cansado, pero al menos con algo más de tranquilidad. La “interconexión” del famoso “One World” no sirve para nada, porque los trámites para endosar los pasajes eran equivalentes a los necesarios para constituir una empresa en el Perú de Hernando de Soto, pero por fortuna nuestro amigo de LAN, comprometido con su causa y calmado de no haber muerto en la Hoguera a manos de los pasajeros que ya habían evacuado la sala principal del Aeropuerto, nos ayudó yendo de un lugar a otro hasta conseguir el itinerario completo de TACA.
A las 9:00am, habiendo cambiado de aerolínea, nos enteramos que TACA no es una línea aérea “surfing-friendly”, por lo que teníamos que depositar $300 para poder meter las tablas al avión. Menos mal que las horas frente a los mostradores de LAN nos habían hecho de algunos aliados a quienes llevamos a TACA y pagaron este monto en 6 billetitos de $50… en el pleno Siglo XXI, ambas aerolíneas del mismo grupo, y un cargo simple se tiene que pagar igual como se compraban gallinas en la época virreinal.
Finalmente llegamos a San Salvador. 33°C para ir aclimatándonos al trópico. Las medias de andinismo y las chompas se guardan a partir de ahora hasta el regreso a Lima. Si consigo señal, subo esta nota al blog, sino trataré de hacerlo en nuestra siguiente parada civilizada.
Ya hemos recorrido el 25% de nuestro camino a las Mentitas. Estamos en LA. La experiencia a sido un poco estresante pero con la compañía de Tolstoi Zapater y sus detallados relatos todo se vuelve más llevadero. Solo espero que nuestro inspirado escritor mantenga su dedicación en todo el trip. Y que su encuentro celestial con el tubo perfecto y los colores de la naturaleza no lo abrumen, ni le reblandezcan esas ganas de expresarse en blanco y negro por la web.
ReplyDeleteYa llegamos INDO, falta poco. !!!!!!
que buena. algunos amigos me llamaban así. Mi esposa dice que no me parezco (me imagino que para ella el oso es más gracioso). Ya en mi hotel... llegué a las 11:30pm a Seattle, muriéndome de hambre porque las conexiones que me habían puesto no dejaban tiempo para nada y en los vuelos solo habían "snacks"... fui a tomar mi taxi al hotel porque ya a esa hora ni shuttle, quería llegar bañarme, cerrar unos asuntos y dormir... mi recuerdo era que un taqxi costaba entre 40 y 50 dólares... no habían taxis!!! pero una LIMO me llevó al hotel por 45 :)
ReplyDeleteJorge que bueno que la hiciste también. Y tu chapa queda! Jajajjaja
ReplyDeleteGracias a tu dato en el Jorge Chavez logramos volar en Taca via El Salvador y lo logramos. Gracias.
Estamos esperando las tablas de Tolstoi q por algun motivo no llegan. Las mias ya estan en buenas manos. Una movilidad nos espera para llevarnos al Mirage en HK. Es un aeropuerto moderno, inmenso, limpio y bien organizado. Muy buenas vi ras al llegar. Son las 6 am.
Numa, el hotel de HK se llama el "MIRA", tú te quedaste en Las Vegas, ¿no te has dado cuenta que acá el timón está a la derecha y cuando hablan no se les entiende ni papa?
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